Puede que el sistema de refrigeración industrial más conocido sea el aire acondicionado pero el climatizador evaporativo industriales ofrece ventajas que lo convierten en como un alternativa eficaz. A continuación, te mostramos una comparativa entre ambos y las diferencias económicas que suponen.
En primer lugar, hemos de destacar que el aire acondicionado cuenta con una gran cantidad de inconvenientes. Entre ellos:
- Liberación de gases contaminantes derivados de su uso.
- Genera un clima no confortable y que no es aconsejado para tu salud, al utilizar siempre el mismo aire.
- Supone un coste alto, tanto por la instalación como por el consumo eléctrico.
Para paliar esta serie de inconvenientes surgió el climatizador evaporativo industrial, el cual basa su funcionamiento en la humidificación del aire del exterior, de tal forma que este se enfría y es usado para regular el clima de un espacio concreto. A diferencia del aire acondicionado, hay que tener las ventanas y puertas abiertas para facilitar que el aire que entra pueda salir y favorecer una circulación correcta.
En contra de la lista anterior, el climatizador evaporativo industrial:
- No utiliza gases contaminantes.
- Renueva constantemente el aire del lugar que enfría y elimina los riesgos de insalubridad.
- El coste de instalación y su consumo son más bajos.
La ventaja principal del climatizador evaporativo industrial frente al aire acondicionado industrial es que no requiere de gases o compresores para refrigerar y necesita, únicamente, producir una sencilla corriente de aire humificada por medio de una bomba de agua y un ventilador. El aire es reciclado de forma constante y favorece un espacio más saludable, que aumenta el bienestar de las personas que allí se ubican, y cuya eficiencia energética es muy alta.
Los climatizadores evaporativos, pese a que humedece el aire, no genera problemas de humedad. Únicamente, puede pasar, si la instalación no es correcta y no se ha tenido en cuenta el cálculo de sobrepresión (cantidad de aire inyectado es superior al aire expulsado). En estos casos, bastaría con instalar un extractor de aire o en espacios más reducidos para favorecer la circulación. Por ejemplo, al abrir alguna ventana. Por tanto, el calor es expulsado al exterior, progresivamente, junto con la humedad.
La sobrepresión, además, favorece que el ambiente sea saludable, pues elimina el polvo, las partículas en suspensión y los olores y llega, incluso, a minimizar la entrada de insectos voladores.
A diferencia del aire acondicionado industrial, mantiene la humedad relativa del ambiente entre el 50 y el 60% (la ideal para las vías respiratorias) y son es más eficiente en climas secos y calurosos.
Respecto del ahorro, este puede llegar a ser hasta de un 80%, en el caso de elegir un climatizador evaporativo industrial, en lugar de aire acondicionado. El consumo energético solo necesita hacer funcionar un ventilador y una bomba de agua. A modo de ejemplo, es capaz de climatizar un espacio de entre 150 y 250 m2 con tan solo un 1kW. Es un punto a tener muy en cuenta, por parte del sector industrial, pues el ahorro es considerable puedes conseguir un mayor resultado.
Por todo ello, el uso de climatizador evaporativo industrial se postula como una alternativa real, eficaz y adecuada, la cual garantiza que el entorno industrial en el que se utiliza promueva unas condiciones más favorables a los trabajadores para desempeñar su labor. Su máxima eficiencia energética, el mínimo coste de instalación y consumo y la postura con el medio ambiente (no emite gases contaminantes) hacen que se coloque por delante de todos los medios hasta ahora empleados para reducir las temperaturas.
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